EL HIPOLa Monja de un conventofue al doctor por un hipo severopronto tenía que realizar un evento,me lo contaron por eso es que lo asevero.“Dr., El hipo me va matando”─A ver hermana échese en la camilla─“Dr., parece como si estuviera mutandono aguanto, la gente se burla y me humilla”.─Veremos, la voy a revisarsoy un Dr. muy serio, yo no mientobueno la veo y después le podré avisar─“Dr., me duele el cuerpo de tanto movimiento”.“¿Dr. y por qué lo veo riendo?”─Es que creo que está embarazada─La Monja se asustó y salió corriendo─Espere hermana, cúbrase, tome una frazada.─Y el Dr. recibe una llamadaera la Superiora de la Madre María“¿Qué pasó Dr., la hermana está inflamadallora y llora y no termina de rezar el Ave María”.─Madre, pasa lo siguienteyo la asusté para que se le paseesperaba un buen resultado subsiguientepero discúlpeme Ud. Madre por este impase. ──Y dígame :¿Le hizo efecto? ─“Claro su tratamiento fue perfecto,solamente que el Cura del confesionariosin ningún motivo, se arrojó del campanario”.EL MANU
viernes, 14 de diciembre de 2012
EL HIPO
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